00:05 Molo Cebrián El responsable de que el mensaje llegue bien al receptor es siempre el emisor. Y muchas veces nos olvidamos de eso.

00:12 Molo Cebrián Hola, soy Molo Cebrián, una persona normal, del montón,que hace un par de cosas bien y el resto soy bastante torpe. Y de las cosas que hago bien, y por lo que estoy aquí, es porque hago pódcast. Sobre todo uno que es muy conocido, que se llama 'Entiende tu mente', que es el pódcast más escuchado de psicología en español en todo el mundo. Un proyecto en el que buscamos ponerle nombre a lo que nos pasa. Muchas veces yo creo que hay mucho tabú con los temas de la mente. Y básicamente lo que hacemos es eso, ponerle nombre a algo que a lo mejor ha pasado por tu cabeza un par de veces, una sensación que no terminas de entender y luego pues también desestigmatizar la ayuda terapéutica, animar a pedir ayuda cuando alguien vea que por su cuenta no puede.

01:01 Molo Cebrián Estamos en una sociedad polarizada, en un mundo polarizado, en un mundo que tiende al blanco y negro, y que no percibe los grises. Nuestro cerebro trata de simplificarlo todo al máximo porque yo siempre digo que me gusta mucho la metáfora del ordenador para enseñar cómo funciona nuestro cerebro, pero es que es verdad. Tenemos memoria ROM y memoria RAM, y la memoria RAM es enana. Entonces tenemos que tomar muchas decisiones de forma muy rápida. Entonces es muy fácil si decimos estos son buenos, estos son malos. Yo siempre soy de los buenos porque también hay un sesgo ahí importante. Y así podemos vivir, ¿no? Porque si tuviéramos que analizar con detalle cada cosa que nos pasa, pues tardaríamos muchísimo tiempo en procesar y en llegar a la conclusión de qué decisión tenemos que tomar en cada momento. Somos una sociedad polarizada, pero es que, bueno, si nos colamos en los libros de psicología social, vemos hasta qué punto podemos llegar a quedarnos con nuestra opinión, pese a que tengamos muchos datos que nos digan objetivamente que a lo mejor no es la correcta. Es decir, te vas a agarrar a cualquier cosa para no ver que estás equivocado, porque asumir que estás equivocado duele, y no queremos que nada nos duela. Se nota sobre todo en los medios de comunicación, por supuesto. ¿No? También porque en general todos buscamos reafirmar aquello en lo que pensamos y creemos, ¿no? Entonces, qué mejor que irte al medio de comunicación que te va a decir lo que quieres escuchar, y todo el mundo lo hace, porque al final, cuando te dicen algo que no te gusta, cuando estás en una conversación incómoda, ¿cómo estás? Pues incómodo, incómoda, ¿no? En cambio, cuando estás en un corrillo con tus colegas y todos pensáis igual, pues reafirmáis más aquello en lo que creéis y os veis contentos. Te vas contento porque piensas que estás en el grupo de los buenos, de los que hacen todo bien. Y esto es así, o sea, no es discutible. Es que nos pasa a todo el mundo, a mí me pasa también.

03:00 Molo Cebrián Comunicación efectiva, ¿para mí cuál es? Bueno, pues aquella en la que eres capaz de expresar aquello que quieres expresar, de tal forma que la persona que lo está recibiendo pues en un porcentaje alto está captando el mensaje que le querías mandar. Seguramente no al 100 %, pero si es un 95, lo firmamos ya. Sí que una de las cosas que vemos cuando nos comunicamos pues por medios donde a lo mejor no hay más que un texto, cuando mandamos mensajes de Whatsapp, por ejemplo. Hay miedo a que no nos entiendan bien, a que no interpreten bien nuestras palabras. Aquí hay una máxima, ¿vale? Y es que el responsable de que el mensaje llegue bien al receptor es siempre del emisor. Y es una responsabilidad que tenemos que tener. Y muchas veces nos olvidamos de eso. Y a veces hay que re-preguntar y decir: "Oye, ¿te ha quedado claro esto?". Es que creo realmente que hay muy poca escucha activa. Y al final, como no hay escucha activa no disfrutamos de las conversaciones. ¿Cuánto tiempo llevamos sin disfrutar de una charla? Porque como tenemos un punto muy egocéntrico, pues queremos solo soltar nuestro discurso. Entonces no nos interesa mucho el de enfrente. El de enfrente básicamente muchas veces está pues para recibir nuestras cosas. Lo que soluciona todos los problemas es el diálogo, es la conversación. Una conversación asertiva, ¿vale? Donde además hay escucha activa. Por asertividad me refiero a una conversación donde las dos personas que dialogan estén al mismo nivel, que no haya una persona que quiera imponer cosas, sino que sea una conversación fluida. Y por escucha activa me refiero a poder estar escuchando a esa persona sin tener ganas de dar tu testimonio, de estar pensando en la respuesta cuando la otra persona está hablando contigo. Escucha simplemente por el placer de escuchar y tomarte si quieres un tiempo para responder. Creo que con esas dos piezas, comunicación asertiva y escucha activa, podemos empezar a romper muchas de esas polarizaciones. Se habla mucho del término empatía, se pone... creo que está muy de moda y mola, porque tiene muchas connotaciones muy positivas. Está bien tratar de entender a la otra persona, ser empático con la persona, sabiendo que seguramente no pueda sentir lo que esa persona siente. A veces decimos: "Esta persona tiene que ser más empática conmigo y sentir lo que yo estoy sintiendo". Nadie va a sentir lo que tú sientes ni cómo tú lo sientes. Es importante tener esa comunicación asertiva. Si le ponemos el adjetivo también de empática, perfecto, pero siempre con un poquito de autocuidado.

05:39 Molo Cebrián Vamos a ponernos en situación, ¿vale? Charla familiar. De esas que no te puedes quitar de en medio, porque tienes que, como poco, ver en Navidades a ciertas personas con las que no hay posibilidad de llegar a acuerdo. Donde hay opiniones muy encontradas. Pues de entrada, lo que hay que decir es que no pasa nada. Es decir, que no pasa nada y que no hace falta convencer a nadie. Y que esa persona puede continuar con su opinión. Pero sí que es verdad que yo he visto en entornos familiares, muchas veces, que aguantamos demasiado para que no haya problemas. Así que yo lo que diría es eso, animar al autorespeto y eso, quitarse la presión de tener que convencer. Qué pesadez, imagínate qué presión, debo convencer a mi cuñado de que bote otro partido político, olvídate. También es verdad que el ser humano a veces quiere controlarlo todo. Y realmente tenemos muy poco control, sobre todo incluso sobre nuestra vida. Y pensamos que vamos a vivir eternamente y la vida nos pega de vez en cuando a una leche y nos dice: "Oye, que estamos aquí de prestado y tenemos control de un mínimo número de cosas".

06:54 Molo Cebrián Hay dos extremos, ¿no?, que a la hora de charlar y de conversar, por un lado, cuando tienes más dudas sobre si puedes aportar o no, y tienes más miedo sobre si lo que vas a decir es correcto o no, puedes tener el síndrome del impostor, que generalmente le ocurre a gente que sabe mucho. Porque cuando sabes mucho, te das cuenta de todo lo que te falta por saber. Pero luego está el efecto de Dunning-Kruger, que le pasa a la gente que no tiene ni idea, que se ha leído solo medio libro, pero que piensa que sabe un montón. No sé si te acuerdas cuando empezó todo el tema de la Alonsomanía, con la Fórmula 1, había gente que en dos semanas era la persona que más sabía de Fórmula 1 de la historia. No, no puedes saber en dos semanas toda la Fórmula 1, ¿no? Pero como sabes un poquito, te piensas que sabes mucho. Bueno, así somos. Aquí creo que es muy sano el asumir que nos vamos a equivocar, que vamos a meter la pata, que aunque queramos hacerlo muy bien, vamos a fallar, que lo hacemos con la mejor intención, pero con los conocimientos que tenemos ahora, y que el día que nos equivoquemos hay que aprender a reconocer que te has equivocado, lo cual es súper sano. Lo otro de verdad que al final… El ir de que todo lo haces bien y todo postureo es muy poco sano. Cuando tú has mantenido un discurso durante un determinado tiempo, si de repente lo cambias, pues para empezar tienes que hacer ese trabajo interior de darte cuenta de que estabas equivocado y luego transmitirlo a los demás. Pero yo aquí vuelvo a una cosa que me gustaría que en esta charla que tenemos sea como el 'leitmotiv', o una de las ideas básicas que se queden aquí. Y es todo el mundo, tú que estás viendo esto, todo el mundo tiene una serie de derechos que no nos cuentan. Y, por ejemplo, me gustaría decir esta frase tan chula que es: "Tienes derecho a cambiar de opinión". ¿Cómo suena? A mí me suena muy liberadora. Pero hasta que no me la dijeron yo pensaba que no tenía derecho a cambiar de opinión.

09:02 Molo Cebrián Como conclusión para la audiencia aquí de Mejor Conectados, animar a dialogar, como hemos hecho aquí, a charlar, a valorar diferentes puntos de vista. No hace falta que los aceptes, pero sí escucharlos, ver que están ahí. Y a partir de hoy, tal vez, con algunas ideas que hemos dejado, por lo menos te hagas un par de preguntas sobre si puedes cambiar cosas en tu día a día, y empieces a mover temas en esa escala de grises que te garantizo que te va a dar cosas buenas y nuevas amistades que seguro que hasta hace poco ni habéis pensado que pudieran llegar a tu vida.