Nuestro invitado de hoy es uno de los psicólogos y podcaster más representativo del panorama nacional. Hablamos de Luis Muiño, el profesional de la salud mental que trata de buscar la sencillez en la psicología con sus pacientes, sus oyentes y sus seguidores de redes sociales.
Hoy abordaremos con él uno de los temas más relevantes de los últimos años y que ha cogido la importancia que se merece impulsando el estudio social de la autoestima: la presión social.
Sigue leyendo y descubre qué es la presión social, la hiperempatía y la influencia social que viven tanto adultos como adolescentes.
¿Quién es Luis Muiño?
Primero, conozcamos a nuestro invitado antes de comenzar a hablar de la presión social y el exceso de empatía. Luis Muiño es un destacado psicólogo y psicoterapeuta cuyo objetivo siempre ha sido ayudar a personas en su crecimiento personal y en momentos de crisis.
Su experiencia en el mundo de la psicología va desde la cooperación internacional en lugares como Kósovo, El Salvador y Angola hasta la psicoterapia en clínica privada. Sin embargo, su actividad no queda ahí, ya que Luis Muiño también es un reconocido divulgador. Participa en el exitoso pódcast “Entiende tu mente”, el más escuchado sobre psicología en España y latinoamérica con más de un millón de descargas mensuales, junto a Molo Cebrián, al que ya tuvimos el placer de entrevistar, y Mónica González.
Luis Muiño también es conocido por sus artículos en periódicos como La Vanguardia, Muy Interesante y El Confidencial. Además, es autor de varios libros exitosos, entre ellos, Perder el miedo al miedo o su última publicación La mente del futuro. Sin embargo, su carrera no se queda ahí, ya que ejerce como docente en másteres y expone en conferencias con frecuencia.
Ahora que ya conocemos un poco más a nuestro invitado de hoy, vamos a hablar de cómo afecta la presión social y qué podemos hacer para manejarla.
Consejos para evitar la presión social
Como comenta Luis Muiño en nuestra entrevista, vivimos en una sociedad individualista. Esto tiene una parte positiva y es que nos queremos más a nosotros mismos y buscamos algo más allá que sobrevivir, queremos ser felices en nuestra vida.
Cuando Luis Muño aborda el tema de la salud mental, comenta que es un estimulante perfecto para conectar entre personas, sin embargo, no debemos caer en ese individualismo que comentamos, porque la mejor forma de cuidarnos a nosotros mismos es también cuidando a los demás y saber escuchar. Ahora, para saber cómo afecta la presión social a las personas, primero nos preguntaremos qué es la presión social o la presión de grupo.
¿Qué es la presión social?
Si nos preguntamos qué es la presión social, concluimos junto a Luis Muiño que es el grado en el que nos influyen las expectativas de los demás. Sabemos qué es lo que quiere la persona que tenemos enfrente y, por ello, actuamos en consecuencia para encajar en el estándar marcado por el entorno y la cultura en la que vivimos y no ser señalado.
Por lo tanto, la mejor forma de detectar qué hacemos por presión social es mirar a nuestro alrededor y ver hasta qué punto nos parecemos unos a otros y preguntarnos si eso es realmente lo que queremos.
La presión social puede tener un impacto significativo en nuestra vida diaria. Entender qué es la presión social y cómo evitarla es crucial para mantener nuestro bienestar emocional. Esta presión puede mostrarse de varias formas, desde expectativas explícitas hasta normas implícitas dentro de un grupo.
Gracias a Luis Muiño ya entendemos un poco más por qué hacemos lo que hacemos y cómo la presión social o coacción social nos dirige en una dirección o en otra. Por lo tanto, está en nuestra mano aprender cómo evitar la presión social. Para ello, hablemos de la asertividad y el exceso de empatía.
Asertividad
La asertividad es una habilidad esencial para enfrentar la presión social. Ser asertivo significa expresar nuestras opiniones y necesidades de manera clara y respetuosa. Según Luis Muiño, practicar la asertividad nos permite establecer límites saludables y mantener nuestra integridad frente a la presión de grupo. Esto incluye decir no cuando es necesario y defender nuestras ideas sin sentirnos mal desde el respeto.
En palabras de Luis Muiño, la asertividad es la capacidad de tener relaciones de igualdad. Es conocer y entrenar la tolerancia a la tensión para ser capaces de transitar el conflicto y hacerle frente de una forma sana y productiva en vez de evitarlo.
Como bien indica nuestro invitado, no se trata de ser perfecto, se trata de ir reformulándonos continuamente para hacer frente a la presión social y nuestras propias presiones internas y saber decir que no.
Cuidado con el exceso de empatía
Luis Muiño nos habla de un término muy interesante poco escuchado: la hiperempatía. Se trata del momento en el que nos olvidamos de nosotros mismos y nuestras necesidades y anteponemos las de los demás. Estamos más pendientes del otro siendo un fenómeno negativo para uno mismo.
El exceso de empatía, como también podemos definir la hiperempatía, encuentra su analogía perfecta en el juego Tetris, como comenta Luis Muiño, en el que si intentas encajar, desapareces.
Para hacer frente a esto, nuestro invitado recomienda tratar de salir de la situación y pensar si serías capaz de decepcionar a la otra persona que tienes enfrente y por la que sientes esa empatía y nos aconseja intentar perder miedo al otro dándonos a nosotros mismos la importancia que merecemos.
Aunque la empatía es una cualidad valiosa, el exceso de empatía o hiperempatía puede hacernos más vulnerables a la presión social. Luis Muiño advierte que, cuando nos preocupamos demasiado por los sentimientos de los demás, podemos olvidar nuestras propias necesidades y deseos. Es importante equilibrar la empatía con la asertividad para evitar que la influencia social nos lleve a comportarnos de manera contraria a nuestros propios valores.
Conocer el equilibrio perfecto entre nosotros mismos y el entorno, con la presión social que vivimos hoy en día, es toda una tarea. Sin embargo, no debemos dejar de intentarlo. Debemos escucharnos a nosotros mismos y escuchar a los demás para conectar, porque cuando lo conseguimos, hacemos cosas increíbles juntos.