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Descubriendo la soledad no deseada

Elisabeth Clapés

· Psicóloga y creadora de de contenido

La soledad no deseada es un tema muy profundo y cada vez más presente en la sociedad actual. A menudo asociamos la soledad con algo negativo, pero Elizabeth Clapés, nuestra invitada de hoy, nos ofrece otra perspectiva y nos ayuda a distinguir entre soledad elegida y soledad no deseada. 

En este artículo de Mejor Conectados, descubriremos cómo afecta la soledad a los distintos grupos de la población; desde niños a ancianos pasando por adolescentes y adultos que encuentran problemas a la hora de socializar para abrir su círculo de amistades. 

¿Quién es Elizabeth Clapés?

Nuestra protagonista de hoy es Elizabeth Clapés, una psicóloga, escritora y divulgadora. Además de su trabajo clínico, es autora de varios libros, entre ellos Perderte para encontrarme y Querida yo: tenemos que hablar, donde trata temas como el duelo, las rupturas de pareja y la soledad. 

Sin embargo, su carrera no acaba ahí, ya que es creadora de contenido en redes sociales donde es conocida como ‘Esmipsicologa’. En Instagram, su principal plataforma, cuenta con una gran comunidad de 1 millón de seguidores con los que comparte contenido sobre salud mental. A través de ella, ha sido capaz de crear pequeños y grandes grupos de apoyo entre la comunidad así como conexiones muy fuertes para personas que sentían una soledad no deseada. Su mensaje es claro: la soledad puede ser una herramienta para el autoconocimiento y crecimiento personal, si se aprende a gestionarla adecuadamente.

En los diferentes libros de ‘Esmipsicologa’, aborda los distintos tipos de soledad y cómo surgen a lo largo de la vida. Por ejemplo, en su libro Perderte para encontrarme, Elizabeth Clapés aborda de manera práctica cómo superar una ruptura de pareja y aprender a disfrutar de la soledad. La psicóloga nos comenta que los momentos de soledad, aunque son difíciles, son esenciales para reencontrarse con uno mismo y sanar heridas emocionales. Pero también advierte sobre la soledad no deseada es un tipo de aislamiento que puede generar sufrimiento si no se aborda de manera adecuada.

¿Qué es la soledad? Diferencias entre soledad elegida y la soledad no deseada

La soledad es una experiencia y una sensación muy subjetiva que no afecta de igual forma a todas las personas y todos los grupos de la población. No siempre está relacionada con estar físicamente solo. Según Elizabeth Clapés, es esencial distinguir entre la soledad elegida y la soledad no deseada, sigue leyendo para descubrir las diferencias:

  • Soledad elegida: hablamos de aquellos momentos en los que una persona decide pasar sola un tiempo para reflexionar, descansar o dedicarse a sí misma. Esta soledad es saludable y, de hecho, puede ser muy beneficiosa. Elizabeth Clapés subraya que aprender a disfrutar de estos momentos en solitario es clave para el crecimiento personal. En sus libros, enseña cómo cultivar una buena relación con uno mismo durante estos periodos.
  • Soledad no deseada: por otro lado, la soledad no deseada es un estado emocional en el que la persona se siente sola y aislada, aun cuando está rodeada de gente. Este tipo de soledad genera angustia y tristeza, y es la que más negativamente tanto a la autoestima como al estado de ánimo en general. Elizabeth Clapés aborda este tema en su trabajo, explicando que la soledad no deseada puede ser una fuente de sufrimiento que afecta tanto a jóvenes como a adultos y ancianos, como nos ha contado en nuestra charla. Más adelante podremos ver algunas estrategias sobre cómo afrontar la soledad.

¿A quién afecta la soledad no deseada?

La soledad no deseada puede afectar a cualquier persona, independientemente de su edad o circunstancia social. Aunque todos podemos experimentar soledad en algún momento, algunas etapas de la vida y ciertos grupos están más predispuestos a sufrir la soledad no deseada que otros.

Soledad en jóvenes

La soledad en niños y adolescentes es una situación que ha crecido en los últimos años y que preocupa a expertos en salud mental como Elizabeth Clapés. En la era digital en la que vivimos, donde las interacciones en línea a menudo sustituyen a las relaciones presenciales, los jóvenes pueden sentirse más aislados que nunca. El miedo a la soledad en jóvenes puede desencadenar ansiedad y depresión, por lo que debemos prestar especial atención a nuestros hijos en esta etapa.

Clapés advierte que, en la adolescencia, el sentido de pertenencia a un grupo social es crucial para el desarrollo emocional ya que los amigos son el eje de nuestro crecimiento y aprendizaje en esta época. Sin embargo, muchos jóvenes experimentan soledad no deseada debido a la falta de habilidades sociales o a situaciones como el acoso escolar o bullying. Esta situación puede llevar a un sentimiento de aislamiento que, si no se maneja adecuadamente, puede tener efectos a largo plazo en su bienestar emocional.

Soledad no deseada en adultos

En los adultos, la soledad no deseada puede estar vinculada a cambios importantes en la vida, como la ruptura de una relación de pareja, la pérdida de amigos o un cambio de entorno laboral. Elizabeth Clapés señala que uno de los momentos en los que más se experimenta este tipo de soledad es después de una ruptura. En estos casos, la persona se enfrenta no solo a la pérdida de la pareja, sino también a la necesidad de redescubrirse y aprender a disfrutar de la soledad.

Nuestra invitada también destaca que muchas personas adultas temen a la soledad porque la asocian con el fracaso o el rechazo. Sin embargo, insiste en que aprender a convivir con uno mismo es una habilidad fundamental para una vida emocionalmente saludable. A través de su libro Perderte para encontrarme, Elizabeth ofrece herramientas para gestionar este tipo de situaciones y promover una relación más sana con la soledad.

Soledad en ancianos

Ahora tocamos un tipo de soledad de la que todos somos muy conscientes, la soledad en ancianos. Esta soledad en esta etapa de la vida es quizás una de las más visibles y dolorosas formas de aislamiento. Muchas personas mayores, especialmente aquellas que viven solas o en residencias, experimentan una profunda soledad no deseada. Elizabeth Clapés explica que, a esta edad, la pérdida de seres queridos, el deterioro de la salud y la falta de interacción social pueden intensificar el sentimiento de aislamiento.

Este tipo de soledad puede tener consecuencias graves en la salud mental y física de los ancianos, incrementando el riesgo de depresión y enfermedades crónicas. Clapés nos asegura que el apoyo emocional y el fomento de las relaciones interpersonales son clave para combatir la soledad en ancianos. Las actividades comunitarias y el contacto regular con familiares y amigos pueden marcar una gran diferencia en la calidad de vida de los mayores.

La soledad no deseada se soluciona con la ayuda de todos

Hablar de soluciones cuando estamos tratando de soledad no deseada es un gran error. Con ese mensaje, ponemos en manos de las personas afectadas una solución que, muchas veces, no depende de ellos. 

Por este motivo, Elizabeth Clapés evita dar esa receta mágica e invita a que esto sea un trabajo de todos. O, como dice ella: “Que nadie tenga que pasar un cumpleaños solo porque nadie de su círculo de amigos ha podido ir porque tenía otros planes”. 
Como dice Elizabeth, todo lo grande que se ha conseguido a lo largo de la historia se ha conseguido gracias a la colaboración de varias personas, porque cuando conectamos con los demás es cuando somos capaces de llegar más lejos.

Transcripción

00:02 Elisabeth Clapés Hola, yo soy Elisabeth Clapés y vengo a hablarte de la importancia de combatir la soledad no deseada.

00:17 Elisabeth Clapés Soy psicóloga, escritora y creadora de contenido en redes sociales, también conocida como 'Esmipsicóloga'.

00:23 Elisabeth Clapés No es de extrañar que la soledad influya, y mucho, en la salud mental de las personas. Pues los seres humanos somos seres sociables por naturaleza, necesitamos de otros para encontrarnos bien. Esto se ve desde el primer momento en el que el ser humano viene al mundo. Y es que cuando somos bebés necesitamos, sí o sí, de nuestros padres, sobre todo de nuestra madre, para sobrevivir. Somos animales tan sociales que llegamos hasta el punto de que el aislamiento social nos puede llevar a enfermar. Se han visto casos en los que presos, que al estar en aislamiento durante muchos días y semanas, acababan teniendo alucinaciones. Estas alucinaciones les llevaban a hablar solos, casi como manifestando esa necesidad de estar en relación, de estar interactuando con otra persona que no es real. Por lo tanto, tiene sentido que en todas las etapas de nuestra vida la conexión con otras personas sea fundamental, hasta el punto de ser uno de los pilares para tener una salud mental estable.

01:28 Elisabeth Clapés La soledad no deseada es la situación de soledad en la que se encuentra alguien que no quiere estarlo. No es tanto el tiempo que uno pasa con uno mismo, el tiempo que invierte uno en pasar, en disfrutar del ocio a solas, que esa es la soledad elegida, sino que se trataría de una situación en la que alguien se siente solo, pero no porque quiera. Y no es lo mismo estar solo que sentirse solo. Es una problemática que abarca a todas las edades. De hecho, de niños lo vemos en problemas como el 'bullying', que ya no solo influye la soledad, el sentimiento de soledad, sino también el sentimiento de rechazo, el ser rechazado por otro ser humano. Que no hay nada más doloroso que ser rechazado por alguien de tu misma especie. Cuando crecemos, en la adolescencia, lo principal son los amigos. Pasan a ser nuestros mayores pilares, nuestros mayores apoyos, las personas de las que aprendemos y con las que crecemos. Y, sin embargo, un adolescente que no se puede relacionar con otro adolescente evidentemente va a encontrarse en una situación de soledad no deseada. Cuando nos hacemos más mayores, nuestra socialización disminuye. El tiempo que pasamos con otros seres humanos disminuye, o al menos el que pasamos de forma obligada pasa como a depender totalmente de nosotros mismos el socializar, el estar con otras personas. Y cuando nos hacemos más mayores esto se va complicando porque las personas mayores en muchas ocasiones tienen amigos a los que, por desgracia, han tenido que despedir porque han fallecido o amigos que debido a problemas de salud no pueden socializar de la manera en la que desearían. Y aquí encontramos otro problema de soledad. Nuestros familiares, en este caso si somos personas mayores, nuestros familiares ya han hecho su vida. Nuestros hijos ya tienen pareja, nuestros hijos ya tienen incluso hijos, amigos, familia propia… Y nosotros pasamos a ser la abuela o el abuelo al que se visita los domingos. Es probable que te sientas muy solo, y esto es una sensación muy desagradable porque como mencionábamos, el ser humano es sociable por naturaleza.

03:20 Elisabeth Clapés Yo recuerdo, hace un año o hace dos años, una amiga mía que me dijo: "Por mi cumpleaños no me hagas una fiesta, porque la última vez que lo organicé no vino nadie". Si tú hablabas con sus amigos de manera individual, te hubiesen dicho: "No, es que yo no pude porque se me estropeó el coche", "yo tampoco pude porque me pasó esto". De hecho, ella me contaba que cada amigo de manera individual tenía una excusa perfecta para no acudir y que ninguno lo había hecho con maldad. Y yo pensaba: no lo han hecho con maldad, pero no lo han hecho teniéndote en cuenta. Porque, ¿cómo puede ser que organices un cumpleaños para 30 personas y no venga ni una? Muchas casualidades tendrían que ser. Entonces, de hecho, eché la vista atrás y pensé: wow, cuántas veces me han invitado a fiestas y cuántas veces me han invitado a cumpleaños y yo he pensado: si puedo, voy. Pero, realmente, era un: Si no tengo nada mejor que hacer, voy. Luego vas y te lo pasas genial, pero parece que el momento de salir de casa se te hace difícil. Pero pienso que cuando estás en casa no solo tienes que pensar en cómo te lo vas a pasar tú, sino en cómo de importante es para la persona que te está invitando que tú vayas. Ojalá no haya nadie nunca de tu entorno que te pida que por favor no le hagas una fiesta de cumpleaños para que no tenga que volverse a dar el golpe de quedarse solo el día de su aniversario.

04:44 Elisabeth Clapés El tema de combatir la soledad hoy en día es un problema, porque cuando nos hacemos adultos toda la socialización recae sobre nosotros, porque el único ámbito en el que tenemos relación con otros, y no si trabajamos desde casa, es en el trabajo. Nuestra vida social se reduce si nosotros no hacemos por amplificarla, pero no siempre tenemos las herramientas para llevarlo a cabo o las situaciones no se dan de la forma que se tienen que dar para que nosotros consigamos conocer a gente afín a nosotros. Ahí está el problema de poner en el individuo el foco de la responsabilidad de ampliar su vida social. No es tan fácil. No es tan fácil porque no todo el mundo habla de cómo se siente en cuanto a la soledad y no todo el mundo busca encontrar a alguien con quien establecer una amistad. Cómo se le dice a alguien: "¿Quieres ser mi amigo?" Lo que es establecer una relación de amistad es más complejo que establecer una relación de pareja. Y, fíjate, que curioso que nos dé más vergüenza decirle a alguien "quieres ser mi amigo" que "qué guapo sales en esa foto" o ponerle un fueguito como respuesta a un Insta storie. Nos es mucho más complicado decirle a alguien: "Me gusta tu forma de ser y quiero conocerte".

05:52 Elisabeth Clapés A nivel social, a nivel educativo incluso o en el trabajo, se tienen que promover las actividades en grupo, presenciales, las actividades, incluso para las personas que trabajan desde casa, se les tiene que fomentar los 'team building' igualmente, aunque estén trabajando desde casa. Y también tenemos que hacer un esfuerzo por ir a lugares presenciales, que cada vez acostumbrados más a nuestra cuevita esto se complica.

06:17 Elisabeth Clapés No nos damos cuenta de que haciendo las cosas más fáciles, muchas veces nos las estamos haciendo difíciles a largo plazo. Quizá a corto plazo es mucho más cómodo entrenar desde casa, estudiar inglés desde casa, aprender incluso a pintar desde casa con un tutorial de YouTube. Pero a largo plazo no nos estamos haciendo ningún favor.

06:42 Elisabeth Clapés Si estás viendo este vídeo y la soledad no deseada es tu situación, quédate porque te voy a contar una cosa. Y es que a causa de escuchar a tantas personas decirme que se sentían solas, empecé una especie de iniciativa hace años, que era hacer algunos posts, vídeos, en los que en los comentarios las personas pudieran ir dejando la comunidad autónoma, la provincia o el país en el que vivían, para que otros que se encontraban en la misma situación y vivían cerca pudiesen hablar con ellos. Esto me llevó a situaciones preciosas, como que por ejemplo se ha hecho un grupo de buceo en Barcelona de personas que se conocieron a raíz de uno de mis posts. Y una de las situaciones que más me emociona gracias a esta iniciativa, la que más me tocó el corazón, fue un chico que vino a mi firma de libros a contarme que nunca había tenido invitados en sus cumpleaños y que tras esta iniciativa, de todas las personas que le dieron a 'Me gusta' en su comentario y que lo comentaron, pasó de no tener ningún invitado en su cumpleaños a tener 70 personas invitadas en su cumpleaños y tener que celebrarlo más de una vez para que pudieran venir todos.

07:49 Elisabeth Clapés Cuando conectamos con otras personas es cuando somos capaces de llegar más lejos y hacer cosas más grandes. Si nos fijamos, todo lo grande que se ha hecho en la historia no lo ha conseguido una sola persona. Todo se hace en equipo, todo se hace con ayuda de otros. A la mínima que algo no nos sale, tenemos que pedir ayuda a una persona que sepa más que nosotros. Esto es para que nos demos cuenta de que no somos el puzle en sí mismo, sino que somos piezas y que por sí mismas no construimos una imagen, sino que necesitamos de otras personas para que quede el cuadro completo.